DOLMEN DE VENDA, EN LAS INMEDIACIONES DE PUENTE AJUDA, PORTUGAL.

El dolmen de Venda, o como se dice en portugués Anta da Venda, traducido quiere decir "dolmen de la venta"; es un dolmen de dimensiones pequeñas situado en la zona de Puente Ayuda, llegamos a el en una ruta organizada de amigos tanto españoles como portugueses, donde lo pasamos magníficamente bien y después de visitar un antiguo puesto fronterizo de la guardia portuguesa también llamado da Venda, nuestro amigo Luis Lobato de Faria, amablemente nos llevo a visualizar este dolmen, lo cuál se lo agradezco personalmente. Este dolmen es muy curioso por su estructura púes en la excavaciones realizadas allí en su día se pudieron identificar dos cámaras funerarias sobrepuestas y lo que aparentemente parece un menhir; a continuación os pongo los detalles de la investigación llevados por Ana Carbalho Días y João Albergaria. 

José Antonio Hinchado Alba.


Este monumento sufrió grandes transformaciones en su estructura arquitectónica, pudiéndose identificar al menos dos cámaras sobrepuestas, correspondiendo a dos fases de construcción en el mismo espacio sagrado. En la primera se distingue un espacio colectivo de grandes dimensiones y delimitado por grandes ortostatos, de los cuales sólo se conservan seis (planta 1).

En la segunda, el túmulo y el corredor fueron parcialmente destruidos y la cámara reutilizada para la construcción del espacio funerario (planta 2).

En su interior se identificó un enterramiento constituido por restos de huesos humanos, un ídolo placa, un vaso y una lámina. La reciente excavación arqueológica permitió identificar un agujero de poste en el túmulo, que podrá haber servido para apoyar un marco de señalización (menhir).


El río Guadiana como limite de un espacio simbólico: 

El sepulcro da Venda está construido en un lugar con una estupenda vista sobre el Guadiana. La elección del sitio puede atribuirse a varios motivos: la necesidad de señalar el espacio dominado por una comunidad junto a una linea que separa naturalmente dos territorios; la simple atracción por el lugar y por el paisaje; o la proximidad con el agua y todo su significado mágico-religioso. La gran concentración de los poblados y monumentos funerarios a lo largo del Guadiana, parece confirmar la idea de que este río representó para las comunidades prehistóricas una fuente de vida, una excelente vía de comunicación con otros grupos y un límite simbólico para la muerte.