EL PUENTE, LA NORIA Y MÁS COSAS EN LA HUERTA DE LA PUERTA DE LA VIÑA, EN TÁLIGA, BADAJOZ. (Con datos inéditos).

En esta ocasión voy a hablar de varios sitios y cosas que se encuentran concentradas en un mismo lugar en lo que coloquialmente la gente de Táliga le llama La Puerta de la Viña, que es una antigua huerta que se accede por un pequeño puente de ladrillo algo reformado en tiempos modernos, es muy antiguo y está sobre el arroyo de Villavieja; antes de cruzar el puente te encuentras en una propiedad un antiguo pozo con su pilón; nada más cruzar el puente te encuentras una pared de piedra con una puerta en recodo de ladrillo posteriormente enlucida y encalada, donde hay una puerta de hierro también muy antigua, quizás de ahí lo de la Puerta de la Viña; y muy cerca la Noria de Norberto o "El Alcalde Bruto" que era como la gente le llamaba al Alcalde Norberto, es una pena como está el acceso a la antigua y bella noria, llena de maleza y zarzas, el pueblo la debería recuperar o su propietario, pues es una pieza importantísima en la arquitectura vernácula y patrimonial de Táliga. 

El puente de la Puerta de la Viña tiene otro casi gemelo aguas arriba, en lo que se conoce como la huerta del Tío Basilio, pero este puente es un poco más estrecho, de todo esto hablaré en otra publicación junto con la procedencia del nombre de Villavieja que es una villa romana seguramente. Recordemos que en este mismo arroyo de Villavieja se encuentra el Puente Viejo de época medieval y la Fuente Vieja aguas arriba.

Aguas abajo del puente de la Puerta de la Viña hay un chalet de construcción moderna, y entre las piezas de su jardín tiene dos fuentes con dos abrevaderos antiguos de granito y algunos sillares también de granito, desconozco su procedencia, pero podían ser de por allí cerca, pues justamente enfrente volviendo a cruzar el arroyo, junto a una parada de autobús, hay otro enorme sillar de granito que se utiliza junto con los restos de una fuente granito de época moderna como asientos, y eso me hace pensar que todos esos sillares sean de por allí.

El arroyo del Villavieja nace en territorios oliventinos concretamente en la finca de Valdecuellos de Murga, pero este arroyo lleva este nombre por pasar a los pies del cerro de Villavieja donde debió haber una villa romana por las inmediaciones, pero insisto hablaré de ello en otra publicación, este cerro pertenece al territorio de Táliga y es el más alto del término con 478 ó 481 metros de altura, dependiendo del mapa.

José Antonio Hinchado Alba.


(1671). (Traducido del portugués por un servidor): ... linda con las propiedades de Espadeiro y vuelve al camino viejo de Santa Maria de los Santos que continua hasta el valle de Favasco, Villa Vieja, y Assopra bollos... .


(1999). Eulalia Bonilla Morales y Joaquín Fuentes Becerra: (Hablando de la calle Huertas). Transcurre paralela al arroyo Villavieja, en cuya vega existen feraces huertas a las que debe su nombre, entre ellas las del "Tío Basilio", "Boticario", "Pintabusio",y " Puerta de la Viña". También es denominada "La Farrapa" por los locales. ¹

¹ El termino "Farrapa" es un claro lusismo (farrapão = andrajoso, harapiento), curiosamente el topónimo se repite en Olivenza y se asigna igualmente a una zona situada en el extrarradio o alejada del centro urbano. En su origen tiene probablemente, como de hecho sucede en la villa de Olivenza, un cierto componente despectivo en alusión a los moradores que en tiempos pasados habitaban esta parte de la localidad. ...

...La calle discurre entre modestas viviendas de una planta y algunos arreates (es arriates J.A.H.A.) de piedra adornados con flores, a media altura se encontraba el Corral del Concejo de la localidad (según documentos del siglo XVII ese corral parece estaba en otro sitio J.A.H.A.). Más abajo el Puente de la Viña, también de ladrillo y de arco único, vuelve a cruzar el arroyo Villavieja. Frente a él una vieja noria ya abandonada.


(2005). Carlos Eduardo da Cruz Luna: Ya que se celebran (sin ironía) 250 años del terremoto de Lisboa de 1755, cabe aquí referir que Táliga fue alcanzada, aunque levemente, por el mismo. El relato de 1756 de São João de Spinha Cordeiro, cura de la localidad, afirma que nueve minutos antes de las diez del 1 de noviembre de 1755 se había oído un gran estruendo, que duró cinco minutos; ninguna casa causó ruina, nadie murió, ni se abrieron grietas. Sin embargo, en la hacienda de Vale de Gameiros, así como en la de Vila Velha, reventaron nacientes de agua. El cura refiere que el 11 de diciembre hubo un temblor de tierra sin importancia, tal como había sucedido unos treinta años antes. Refiere, finamente, que había en Táliga 250 hombres y 166 mujeres.


(2006). José Serrano Serrano: ... Otras huertas famosas de aquella época eran las del Tío Boticario, la de Pintabusio y la de la Puerta de la Viña.